Así como la relación que los une a los seres humanos, los cuales se identifican con él hasta el punto de fusionarse, como lo demuestra la mitología y los centauros, los indios de las distintas culturas lo consideran un igual, cuyo espíritu o alma también llega a fusionarse con su dueño.
La cultura China por supuesto lo incluyó en su Horóscopo, atribuyéndole virtudes que aquellos que se encuentren bajo su signo pueden considerarse bendecidos por todas ellas, comenzando por la nobleza.
En el arte Chino del Feng Shui, su figura representa la nobleza y la libertad, por ello se lo utiliza para atraer el éxito, la felicidad, el honor, unido a la valentía y la fortaleza. Augura una buena vida en todos sus niveles, tanto íntimos como sociales, rodeándose del factor más importante que es la seguridad.
Como los caballos simbolizan el elemento “Fuego”, o la "actividad-Yang" tener una imagen con muchos caballos corriendo, inducirá al incremento de la energía en el área que se le designe. Su atracción es muy poderosa, además de ser protectores, ya que es costumbre en china colocarlos frente a la puerta de entrada del hogar con este fin.
Además de representar uno de los 7 tesoros del Budismo, dentro de las cosmogonía china tiene correspondencia con el elemento fuego y este elemento debe tener una dirección especifica que se debe respetar, acorde al hemisferio del planeta donde se habite. Para el Hemisferio Norte su dirección es el Sur y para el Hemisferio Sur, su dirección es el Norte.
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